El arte conceptual muestra cómo se vería el nuevo avión de combate volando sobre Londres
El gabinete de Japón aprobó la exportación de nuevos aviones de combate que está desarrollando con el Reino Unido e Italia, en el último alejamiento de sus políticas pacifistas.
Las reglas de exportación de armas se relajaron para permitir la venta de aviones a países con los que Japón ha firmado acuerdos de defensa y donde no hay ningún conflicto en curso.
Japón se ha comprometido a duplicar el gasto militar para 2027, citando las amenazas que plantean China y Corea del Norte.
Las autoridades dijeron que toda venta de aviones de combate requeriría la aprobación del Gabinete.
Se espera que el avión se despliegue en 2035, en lo que será la primera asociación de desarrollo de equipos de defensa de Tokio con un país distinto de Estados Unidos.
La última medida se produce antes de la visita oficial del Primer Ministro Fumio Kishida a Estados Unidos en abril, donde se espera que enfatice la alianza de Tokio con Washington y la voluntad de su país de involucrarse más en asociaciones de defensa.
Kishida también dijo que permitir la exportación de aviones de combate a terceros países es «esencial» para mantener la credibilidad de Tokio como socio en otros futuros proyectos de defensa internacionales.
«El plan para crear aviones de combate con capacidades esenciales para la seguridad de nuestra nación debe realizarse para garantizar que las defensas de nuestro país no corran peligro», dijo el martes el portavoz del gobierno, Yoshimasa Hayashi.
Pero el Ministro de Defensa japonés, Minoru Kihara, dejó claro que Japón seguiría comprometido con la «filosofía básica de una nación pacífica» pasando por «estrictos procesos de toma de decisiones» respecto de las exportaciones.
Después de la Segunda Guerra Mundial, el Japón ocupado por Estados Unidos adoptó una constitución que decía que el país renunciaba a la guerra y al uso de la fuerza para resolver disputas internacionales. La constitución no reconoce oficialmente al ejército y lo limita a capacidades de autodefensa.
También impuso un embargo a la exportación de armas, que se alivió por primera vez en 2014 bajo el entonces primer ministro Shinzo Abe.
En diciembre de 2023, Japón relajó aún más las reglas para permitir que las armas letales que fabrica bajo licencias extranjeras se vendan para exportar al país donde tiene su sede el licenciatario.
Esto allanó el camino para que Tokio enviara misiles de defensa aérea Patriot a Estados Unidos. Los misiles Patriot se encuentran entre las armas más avanzadas que Estados Unidos ha proporcionado a Ucrania.
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